Funcionaria “vip” y su jefa caen en contradicciones

La “Técnica” Luz Melgarejo de Beraud, investigada por presunto planillerismo y recategorización irregular de rubros, y su jefa, la supervisora Ada Luz Fernández de Rodríguez, ambas de la Supervisión Administrativa Región 27 de Luque, cayeron en groseras contradicciones. A continuación desvelamos la coartada de ambas funcionarias del Ministerio de Educación y Ciencias (MEC), según documentos.

Paso 1. En el acta de constitución del MEC, la docente declara que en «febrero del año en curso» comenzó a gestionar su jubilación.

El pasado 6 de mayo Luque Noticias empezó una serie de publicaciones acerca de presunto planillerismo cometido por la docente Luz Melgarejo de Beraud.

En aquella oportunidad, la supervisora Ada Luz Fernández de Rodríguez, había manifestado que la “Técnica” a su cargo Luz Melgarejo de Beraud, se encontraba de “reposo” y estaba “gestionando” su jubilación.

Sin embargo, recién el 7 de mayo presentó su solicitud de jubilación en el Ministerio de Hacienda. Es decir, un día después de la publicación. Ver facsímil.

Al día siguiente, específicamente el 8 de mayo, en el acta de constitución de la comitiva de la Dirección de Transparencia y Anticorrupción del MEC, la propia docente alega tener todos los documentos que respaldarían su asistencia, comisionamiento y solicitud de jubilación iniciado “en febrero del presente año”.

Paso 2. En parte inferior derecha del documento se observa que la docente presentó su pedido de jubilación, pero recién el 7 de mayo, un día después de la publicación.

Sin embargo, el documento demuestra lo contrario. El pedido de jubilación recién empezó el 7 de mayo, y la propia supervisora declaró que la docente a su cargo no cuenta con comisionamiento. Ver facsímil.

La sindicada también presentó un certificado médico (reposo) de un sanatorio privado (Sanatorio Internacional), por 48 horas. El “documento” fechado el 6 de mayo no fue visado por el Instituto de Previsión Social (IPS) y carece de mesa de entrada en la Supervisión de Control y Apoyo Administrativo, dependiente del Ministerio de Educación, en donde figura como “Técnica”.

También resultó muy llamativo el hecho de que la docente estando de “reposo” acudió a la Supervisión para participar de la constitución de los abogados del MEC, el pasado 8 de mayo, tal como se aprecia en el documento. Ver facsímil.

Otro punto que no concuerda guarda relación con el reposo médico y el informe elevado por la supervisora Ada Luz Fernández a la coordinadora departamental, Florinda Elizabeht Vera Wurster, a quien le informó que la docente Luz Melgarejo cumple funciones en la Supervisión a su cargo y es la encargada de la planilla de Personal y del Registro Único del Estudiante.

Sin embargo, la supervisora “no se percató” que el reposo es por “crisis hipertensiva”, según el certificado médico del Dr. Alfredo Meza, del Sanatorio Internacional.

En uno de los párrafos, la supervisora asegura que la docente a su cargo “presenta un diagnóstico de diabetes tipo 1, insulina dependiente, en consecuencia; ante crisis de hopoglucemia la recomendación médica procede al reposo, señala textualmente el informe elevado a Vera Wurster.

La supervisora también obvió en el informe a la coordinadora acerca de la recategorización de rubros de la docente investigada. En ese sentido, es importante señalar que la docente Luz Melgarejo sin concurso y sin contar con perfil accedió entre marzo a agosto del año pasado a rubros catedráticos.

Según los documentos, la maestra cuenta con 260 horas cátedra y figura en las escuelas Silvio Pettirossi, de Luque, y Gral. Máximo Santos, de Asunción.

La funcionaria percibe un sueldo mensual de G. 6 millones, y desde febrero pasado no acude a su lugar de trabajo.

Paso 3. La supervisora también mintió en su informe para salvar a su protegida. Alega que la docente presentó un diagnóstico de diabetes, mientras el el certificado de reposo figura «crisis hipertensiva».

La cuestionada docente hasta promovió sin éxito un amparo constitucional contra Luque Noticias para tratar de frenar que se publiquen la pesquisa encabezada por el Ministerio de Educación en su contra.

La jueza de Capiatá, Jovita A. Rojas de Bortoletto, no se prestó a su juego y no dio lugar a su pedido de amordazar a la prensa para ocultar su fechoría con la complicidad de la supervisora Ada Luz Fernández de Rodríguez.

Por último, cabe destacar que varios de los funcionarios convocados por la Asesoría Jurídica declararon que la docente no asistía desde febrero pasado a su lugar de trabajo, según informaciones extraoficiales.

Mientras miles de estudiantes no cuentan con docentes en sus instituciones, la mayoría de los docentes de la Supervisión Administrativa Región 27, de Luque, cuentan con rubros catedráticos.

En ese sentido, la propia supervisora, Ada Luz Fernández de Rodriguez, cuenta con 260 horas y figura como “encargada de despacho” de la Supervisión Región 27. La docente llegó al cargo sin concurso de oposición.

Paso 4. El reposo otorgado por el médico Alfredo Meza, del Sanatorio Internacional, no fue visado y carece de mesa de entrada en la Supervisión. Tampoco fue asentado en la planilla de asistencia.

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